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domingo, 28 de octubre de 2012

Así soy Yo.



Mi nombre es Gloria Patricia, soy nacida en Medellín, Colombia. Tengo muchos  años viviendo en Venezuela. Me dedico al modelaje y además ofrezco mis servicios como acompañante profesional.
 
Estoy muy clara que no es fácil tratar de explicar en un espacio tan breve mi forma de ver y vivir la vida. Sin embargo trataré de hacerlo de  la forma más honesta y directa posible aunque cambiare algunos nombres para ptoteger a las personas involucradas ya que no tengo su autorización para hacer públicas nuestras relaciones y yo respeto mucho el derecho a la privacidad que todos tenemos.
 
Comenzaré por decirles que mucha gente me considera que soy una puta. Hace algunos años me hubiese sentido muy ofendida de que pensaran así de mi, pero en estos últimos años he descubierto y aceptado que quizas tienen razón en llamarme de esta forma, ya que muchas veces me comporto como una puta y ademas me gusta. Por lo tanto como les he prometido  que les dejaré saber como soy en realidad, debo comenzar por aceptar esta realidad.

Yo me he fui dando cuenta  de ello durante estos últimos 7 años, ya que pude comprender que todas las reacciones que  mi cuerpo experimentaba y todas las sensaciones que sentía como producto de todas las situaciones sexuales en que me vi expuesta, no eran más que las órdenes conscientes que mi cerebro daba a todo mi cuerpo. Empecé a notar cada vez de una forma más evidente que mi libido estaba siempre a flor de piel y que cada vez necesitaba más ser follada salvajemente. Mi sexualidad que hasta ese momento puedo afirmar sin lugar a dudas había sido completamente trivial y anodina, fue evolucionando hasta ser completamente lo contrario. Fue muy claro para mi que en realidad yo era una verdadera obsesa del sexo, una adicta al placer y al desenfreno.

En otras palabras al abrir mi mente y mi cuerpo al placer sexual me di cuenta que yo era realmente  una ninfómana, por lo que durante estos últimos siete años he follado como muy pocas mujeres pueden decir que lo han hecho. Y les aseguro que cada día siento más necesidad de ello. Esto me llevó a darme cuenta que las reglas, los tabúes y las prohibiciones no eran para mi.



A medida de que fui viviendo todo ello fui poco a poco entendiendo que la verdadera Gloria Patricia estaba enamorada del vicio, de la  lujuria, de la depravación, de la necesidad de sentirse dominada. Cada vez deseaba con más intensidad actuar como un animal sexual buscando experimentar cualquier situación que me generara un placer fuera de control. En otras palabras comprendí  lo pervertida que yo era en realidad.

Debo decir que en un principio aún no lo aceptaba plenamente, pero Cada vez fui más consciente de todo ello y finalmente  asumí plenamente mi nuevo rol y mi nueva vida. 
 
Además era muy evidente el deseo que despertaba y despierto en los hombres, los cuales me buscan todo el tiempo y cuando comencé a trabajar como dama de compañía me di cuenta de que atraía muchisimo no solo a los hombres sino también a las mujeres, con  mi cara y mi figura. Enseguida aprendí que podía sacar dinero de  todo eso,  ya que tanto los hombres como las mujeres estaban dispuestos a pagarme lo que les pidiera por salir conmigo y ni se diga por tener sexo conmigo. Con el paso del tiempo me volví muy buena haciendo esas cosas que muy pocas mujeres se atreven a hacer. Era muy popular y atraía una clientela  muy concreta, casi todos  mis clientes eran y siguen siendo hombres y mujeres muy ricos.

Es increíble la cantidad de hombres y mujeres que han contratado mis servicios a pesar de que con tanto dinero y fama que tienen podrían conseguir a la mujer que desearan sin necesidad de pagarle, pero por alguna razón prefieren verse envueltos en una relación con una mujer como yo, que cobra por darles compañía. Trabajar como dama de compañia me ha hecho ganar muchísimo dinero y espero que me haga aún ganar mucho más dinero.

Debo aclararles que actualmente si no me provoca tener relaciones con la persona que me contrata, no lo hago. En mis contratos el sexo no esta incluido.

Yo formo parte hoy en día de esas mujeres de buena familia, profesionales, actrices, modelos, universitarias e incluso colegialas que cobramos por nuestra compañia cifras que superan los miles e incluso  millones de dólares, ya que nuestros clientes  son banqueros, altos ejecutivos, millonarios y políticos. Aunque la realidad es que muchas si venden su cuerpo, como yo una vez lo hice.

No tengo ningún problema en decirles que yo al igual como muchas mujeres y hombres ejercía una actividad de prostitución detrás de ofrecer mis servicios como acompañante o escort como también se le conoce. La única diferencia en mi caso con la mayoría de ellas y ellos, era que yo si he tenido que trabajar en las calles recostada contra la pared de algún antro o parada en alguna esquina esperando clientes y también he trabajado en  prostíbulos. Inicialmente lo hice por experimentar lo que ello implicaba, luego me vi forzada a hacer todo esto porque me obligaron en una época que estuve secuestrada y posteriormente lo  he hecho en otras diversas oportunidades, en las que he tenido que trabajar como puta callejera en las calles de varias ciudades europeas. Todo ello se los contaré más adelante. Hoy en día no es así y si lo llego a hacer nuevamente alguna vez será por mi propia decisión, buscando tener sexo de otra manera mas bizarra.

Quisiera explicarles como me inicié en esta vida. Tal como les dije anteriormente hace 8 años yo era una persona muy diferente, quien jamás se hubiese atrevido a llevar a cabo sexualmente nada de lo que  es corriente en mi vida actualmente. Yo era una mujer que solo se preocupaba de su trabajo y de sus estudios. Había hecho algunos trabajos de modelaje pero nunca me pasaba por la cabeza ofrecer mis servicios como acompañante profesional. Debo decirles sin embargo que he tenido relaciones sexuales desde que tenía 16 años,  pero no fue sino justamente hace 8 años que se comenzó a producir un cambio completo dentro de mi ya que  comencé a tener conciencia de lo que realmente significaba el sexo para mi, lo cual se fue afianzando en la medida que tuve que vivir toda una serie de sucesos que he decidido transmitirles a través de publicaciones que iré haciendo en este blog.

No tengo dudas en afirmarles que a partir de allí me fui transformando en la mujer que soy hoy en día. Una mujer que se dedica a disfrutar intensamente su vida sexual.
Comenzaré contándoles como empezo todo esto, lo cual entre otras cosas me  permitió experimentar lo que implicaba tener relaciones anales y tener sexo en sitios públicos. Hace ocho años para mi, como para muchas personas el sexo era un tabú del cual ni siquiera me atrevía a hablar.  Sin embargo todo esto cambio drásticamente  de un momento a otro y yo estoy muy consciente de cuando y como esto me ocurrió.

Todo comenzó cuando me decidí salir por primera vez con Alberto, un hombre casado, del cual debo decirles que había estado enamorada desde mucho tiempo atrás, pero con el cual nunca había tenido nada. Yo trabajaba en la misma compañía donde él era un alto ejecutivo y les puedo decir que más bien yo creía que él no me quería, sino que por el contrario deseaba hacerme la vida imposible. Incluso buscando seguridad cometí la torpeza de aceptar a otro hombre y estuve casada unos años con esa persona, de quien afortunadamente me divorcié.
 
Alberto no solamente me llamaba a mí la atención, sino que llamaba la atención de todas las mujeres que lo conocíamos. El es un tipazo de esos que levantan  pasiones, que te excita de solo verlo.  Un día inesperadamente se me acercó y me invitó a salir, yo acepté su invitación sin dudarlo ni un minuto, a pesar de que me daba terror salir con alguien casado, ya que eso era uno de esos falsos conceptos que desde muy joven me habían inculcado. Lo hice sin saber que ello iba a cambiar mi vida por completo.

Yo nunca pensé que Alberto me fuese a invitar a salir, yo no me imaginaba que yo le llamaba la atención como mujer. De lo que no tenía idea tampoco era lo sexualmente salvaje que él era, ya que el aspecto que él proyecta es de ser un tipo súper  maduro, serio y más bien introspectivo. A pesar de lo joven que era, su experiencia sexual era terriblemente bárbara, sin ninguna duda Alberto es y era explosivo y brutal desde el punto de vista sexual. El conoce las mil y una técnicas en el arte de cogerse como debe ser a una mujer y dejarla no solo satisfecha sino con más y más ganas de repetir una vez tras otra el acto sexual.
 
Tu no tienes ni idea de cómo te va a follar porque su carita de niño malo esconde al hombre tremendamente experimentado que es. Conocerlo fue abrirme a un mundo de experiencias jamás vividas por mi, nunca  hubiera imaginado lo ardiente que yo soy. Por otra parte a pesar de haber tenido relaciones desde tan joven, y  de haber tenido varias parejas, nunca pensé que un solo hombre podría proporcionarme tanto placer.
 
El me introdujo en un mundo que no conocía, sórdido, sin tabúes y sin limitaciones. Voy a confesarles que antes de tener relaciones sexuales con Alberto, tenía muchas reservas, porque no había estado antes con nadie igual a él, pero luego de conocerlo, los complejos, las pendejadas, los tabúes  y las limitaciones en mi vida sexual fueron desapareciendo.
 
Alberto es de esos hombres que para llegar a establecer una relación con él debes pasar por "múltiples pruebas sexuales”, que te propone sin tener ningún tipo de tapujos, él te dice lo que desea que hagas y si quieres continuar a su lado debes aceptarlo y hacerlo, en otras palabras debes avanzar en su juego sexual Por ello mis puterías no tenían límites para él.
 
El fue quien me abrió los ojos  y me hizo hacer muchas cosas que jamás hubiese pensado que era capaz de hacer. Tuvimos sexo en público, me introdujo  por primera vez en mi vida muchos tipos de objetos por cada uno de mis agujeros, en privado y también en público, hizo que me atreviera a desnudarme por completo en un carro en plena vía pública y que además  no me importara en absoluto exhibirme así, desnuda en el carro, por varias calles sumamente transitadas en plena ciudad de Caracas, sin darle ninguna importancia a que todos pudieran verme.







Me indujo a que no me molestara estar ligera de ropa, es decir que cuanto más me desnudaba, más cómoda estaba. Yo sentía que de esta forma podía vencer mis miedos y por eso cada vez fui más osada, llegando a vestirme de una forma tan atrevida y sensual, que quien me viera aseguraría que yo era una puta en busca de clientes.  Comencé a no usar ningún tipo de ropa interior, exhibiendo de esa forma mis zonas intimas en público con total descaro.











Le entregué la virginidad de mi culo y me hizo conocer que soy una mujer multiorgásmica. El me ayudó a superar mis inhibiciones, desbloqueando por primera vez mi potencial de dar y recibir placer erótico.




El me enseñó que debía dedicar tiempo a la sexualidad y disfrutar del juego erótico, procurando ampliar mi repertorio de actividades sexuales coitales y no coitales, ya que pude entender que el sexo no empieza ni acaba en la penetración, aprendí que debía explorar mi cuerpo y el de mis acompañantes, para luego darme el placer de disfrutar del conocimiento erótico de los dos, o de todos los que estábamos teniendo sexo, a fin, de que pudiéramos poder gozar de un verdadero buen sexo.


Me enseñó que uno tiene que detenerse en el disfrute de las sensaciones, de las caricias, que las prisas no son aconsejables en las relaciones sexuales. Me hizo comprender que la regla más importante de la sexualidad compartida es poder tener la capacidad de dar y de recibir placer, pues la sexualidad siempre debe basarse en un intercambio para que todos puedan disfrutarla adecuadamente.
 
Estos fueron mis inicios y hoy en día como les he dicho soy como soy por elección propia, es algo que escogí por mi propia voluntad, ya que descubrí sin lugar a dudas, que esa era mi naturaleza y lo he aceptado plenamente. Yo fui durante mucho tiempo una mujer normal y en estos últimos años he sido una mujer tan absolutamente dedicada al sexo que muchos pudieran considerarme con mucha razón que soy una puta descarada, y no me cabe la menor duda de que si eso es ser puta, es mucho mejor que como vivia antes y no me arrepiento de comportarme de esa forma, se los puedo asegurar.


Mucha gente me ha preguntado que porque soy tan obsesa con el sexo. La respuesta es  muy simple porque Dios me hizo así y cuando me di cuenta de ello y lo acepté, comencé a vivir más feliz.
 
Quiero dejarles muy claro  además que me importa muy poco lo que la gente piense y diga de mi.
 
Yo entiendo muy bien lo que significa  para una mujer ejercer la prostitución, ya que como les dije antes en varios momentos de mi vida lo he hecho. Yo admiro a esas mujeres que se dedican a esta profesión, porque es sin duda un trabajo muy duro y peligroso.

Yo a esta altura de mi vida y a pesar de ser tan obsesa del sexo o tan puta como dirian muchos, tengo relaciones sexuales solo cuando, donde y con quien quiero.
 
Soy sin duda alguna  una mujer con una muy controversial forma de ser, soy muy atrevida, desenfadada, explosiva, irresistible, muy desinhibida y totalmente  libre de prejuicios. Yo acepto la sensualidad como algo inherente a nuestra naturaleza y por lo tanto creo que debemos disfrutarla y vivirla plenamente sin ningún tipo de limitaciones y sin sentir ningún tipo de vergüenza por nuestras acciones.  Soy de esas personas que piensan firmemente que no hay culpa que valga, si el placer valió la pena.
 
Yo soy una mujer muy descarada que simboliza lo que casi todas las mujeres quieren ser y no se atreven. Me encanta ser independiente y sentirme  muy libre. Soy como un volcán lleno de energía y sexualidad.  No es posible que pase inadvertida para nadie, ya sea hombre o mujer.


También puedo afirmar que soy híper sensual, es decir siento muchas veces una necesidad incontrolable por tener sexo de todo tipo ya sea anal, oral, vaginal y mi motivación lúdica está fijada en tener relaciones sexuales con otras personas. Si estoy sola necesito muchas veces recurrir a la masturbación para quedarme tranquila. En otras palabras soy una mujer hiperactiva desde el punto de vista sexual, o lo que es lo mismo una adicta al sexo.

Me gusta experimentar cosas nuevas y cumplir fantasías. Pienso que la creatividad y el erotismo están totalmente unidos, por ello si deseamos crear un momento único  no debemos olvidar que  este se alimenta de pasión,  de instinto, de sentidos, de naturalidad y muere por exceso de coherencia, de reglas, de esquemas, de repetición. Un buen encuentro sexual necesita  de apertura a lo impredecible y de la espontaneidad. Por estas razones yo disfruto hacer el amor donde me provoque y con quien me provoque.
 
Me fascina exhibirme, me  encantaría siempre estar desnuda y aunque lo he hecho públicamente, se que no puedo hacerlo constantemente. Pero como me gusta hacerme notar, que la gente me vea, me visto de una forma muy sensual buscando mostrar lo más que sea posible de mi cuerpo para que los hombres se vuelvan locos y que por donde yo pase me miren con deseos de desnudarme y poseerme.  Me encanta sin lugar a dudas sentirme deseada, realmente lo disfruto.



Me fascina tener relaciones con personas desconocidas, me gusta portarme mal y peden estar seguros de que lo hago muy bien. Como ven me gusta decir y hacer lo que muchas mujeres quisieran, pero no se atreven. Yo soy así y si por eso me llaman puta, no me importa en absoluto, ya que estoy muy clara de que si eso es ser una puta, estoy muy orgullosa de ello y  me encanta serlo.

Partiendo de todos estos  principios trato de vivir mi vida entregándome a buscar y hacer sentir el máximo placer posible a quien o quienes compartan momentos conmigo, pero hoy en día solo como dije antes, si lo quiero hacer.
 
Para ello siempre estoy dispuesta a comportarme como una puta cualquiera si así lo requiere la situación y/o  así lo desean mi compañero o compañeros. Aún más no me importa actuar como la esclava sexual de quien o de quienes estén conmigo, acatando cualquier orden que me den por más atrevida que esta sea.


En el fondo debo reconocer que me gusta mucho sentirme y que me traten como a una puta, como alguien cuyo único objetivo es dar placer. Debo decirles que me gusta tener sexo principalmente con los hombres, aunque creo importante aclararles que  soy completamente bisexual y por lo tanto no tengo ningún tipo de problema en tener relaciones con otras mujeres, por lo contrario me gusta y las disfruto mucho.

Más  aún en diversos momentos en estos últimos años he sido entrenada para poder actuar como esclava sexual para mujeres. Las personas que me han sometido a esto han usado cada cosa desde la humillación, el s&m, el bondage, el spanking, los azotes,  los fisting anal y vaginal, el sexo con otras mujeres y principalmente la psicología para lograr remodelar mi mente y mis actitudes a fin de incrementar mi deseo por las mujeres  tratando de llevarme hasta al límite de convertirme en una lesbiana, lo que nunca han logrado. Pero en todo caso si se aseguraron de que yo pueda actuar como una obediente esclava sexual dispuesta a satisfacer los deseos de cualquier mujer  y les aseguro que las puedo llevar a alcanzar el éxtasis total.
 
Debo confesar que en mi vida las relaciones sexuales son sin duda algo fundamental. Sin ninguna duda en este sentido soy primaria a un nivel casi animal.

Me encanta que practiquen conmigo el arte milenario del “bondage” (Encordamientos eróticos ejecutados sobre una persona ), ya que esto me excita mucho. Los atamientos pueden hacerse sobre una parte o sobre la totalidad del cuerpo, utilizando generalmente cuerdas, aunque también en muchas ocasiones han empleado para inmovilizarme cintas, telas, cadenas, esposas, y cualquier otra cosa que pudiese servir para tal fin.  Como pueden ver en las fotos que he publicado en twitter y en las que acompañan esta narración. Con cierta frecuencia me han puesto algún tipo de mordaza y/o me han vendado los ojos como complemento a las ataduras.
 
El bondage puede usarse como una práctica estético-erótica, como parte de una relación BDSM, como una variante erótica más o como un elemento en ceremonias de dominación o de sadomasoquismo. En mi caso yo he pasado por todas ellas.
 
La razón por la que me gusta ser sometida a la inmovilización por medio de ataduras es la liberación de inhibiciones y responsabilidades que me provoca, en la medida en que confío las llaves del juego erótico a otra persona, que es quien marca las pautas. La sensación de dejarse llevar, de despreocupado abandono erótico, es para mi altamente gratificante en el plano sexual.
 
Además me atraen mucho también las sensaciones físicas que me generan las ataduras, tales como la presión de la cuerda, la imposibilidad de moverme, el roce e incluso la abrasión producida por la cuerda al desplazarse sobre mi piel. Ligado a esto último está asimismo el placer obtenido por la adrenalina que genero el verme ante lo que representa un peligro simbólico. Me atrae igualmente la sensación de impotencia cuando hago intentos por liberarme. A mi personalmente  me agrada realizar estos intentos mientras estoy siendo estimulada sexualmente por la persona o personas activas, aunque el bondage no implica necesariamente contacto sexual.
 
Me he visto frecuentemente sometida al uso del bondage en los llamados juegos de sumisión que son aquellos en los que  he cumplido un papel de esclava sexual de alguien en particular o de un grupo.
 
Finalmente me gusta que empleen el bondage como complemento de otras prácticas sexuales, incluso de tipo enteramente convencional, eso estimula mi libido y la de la persona que me lo ejecuta.
 
Debo confesarles que he tenido  otras experiencias muy intensas  desde el punto de vista sexual ya que por ejemplo en varias oportunidades he follado con las denominadas maquinas sexuales. En este sentido he tenido experiencias sexuales con muchas de ellas e incluso en varias oportunidades me han utilizado para probar el funcionamiento de algunos prototipos.
 
Al principio me pareció algo extraño tener sexo con una máquina pero después de experimentar las sensaciones tan intensas que es posible alcanzar con las mismas, cambié rápidamente de opinión y debo decirles que actualmente sin duda me fascina poder tener sexo con una de esas maquinas.

En muchas ocasiones me han contratado incluso para hacer exhibiciones frente a público.
 
 

Además debo decirles que debo ser una de las pocas mujeres en el mundo que puede ser follada por el culo con 4 dildos al mismo tiempo, lo cual lo he experimentado empleando una de estas maquinas sexuales. Les puedo decir que lo que sentí  en esa oportunidad fue realmente increíble. Creo que el hecho de haber tenido relaciones sexuales con equinos  y de haber sido sometida varias veces a dobles fisting anales me permitió lograr poder someterme y pasar esa prueba extrema.
 
Deseo que sepan también que  en numerosas ocasiones he trabajado como prostituta callejera y en prostíbulos, algunas veces por curiosidad, pero en otras oportunidades me han forzado a hacerlo. Además he sido entrenada, me han vendido y me han usado como esclava sexual en varias oportunidades. También me han hecho practicar varias veces la zoofilia con diferentes clases de animales. Por todo ello es que aprecio tanto la libertad que tengo hoy en día de poder escoger a quien,  donde y como entregarme.
 
Yo creo que cuando uno mira hacia atrás, debe hacerlo para tener más energías para seguir adelante. No hay duda que he pasado por momentos muy duros, pero lo importante es que he logrado superarlos y me siento muy bien conmigo misma porque a pesar de que me han obligado en algunas ocasiones a llegar muy bajo, hoy en día me siento muy segura y no me arrepiento de haber vivido todo esas experiencias, ya que aprendí muchas cosas sobre mí, sobre mi capacidad de sentir y de entregarme.
 
Todo lo vivido me ha dado mayor fortaleza ante la vida y me  a hecho estar muy clara de que quiero seguir viviendo como lo estoy haciendo. He sido y soy muy promiscua, ya que por mi propio gusto o forzada he  tenido relaciones sexuales con muchísimos hombres y/o mujeres en mi vida y espero poderlo seguir haciéndolo por mucho tiempo.
 
Actualmente salgo con varios amigos ocasionales con quienes mantengo intensas y frecuentes relaciones sexuales, ya que no tengo una pareja fija y como les he dicho por ser una ninfómana necesito frecuentemente desahogarme.
 
Igualmente  como ustedes saben trabajo como acompañante de aquellas personas que en forma personal o como grupo, ya sean hombres y/o mujeres me lo soliciten. En caso de sentirme cómoda con ellos y de querer tener relaciones sexuales con los mismos, no tengo tampoco ningún  tipo de problema de entregarme por completo para que tengamos sexo, donde, cuando, como y cuanto quieran.
 
No podría llevar la cuenta de las veces que ha tenido que coger un avión por reunirme con alguna persona o grupo de personas por mi trabajo. Debo decir que indudablemente no es algo extraño en esta profesión, lo requiere el estilo de vida que he escogido.  No tengo ningún problema en afirmar que siempre que puedo estoy viajando y teniendo sexo con desconocidos. Por supuesto estoy siempre totalmente dispuesta a ir donde  lo pueda encontrar y disfrutarlo con la mayor libertad posible.
 
Soy una mujer flexible y de mente muy abierta. Me encanta el sexo interracial. Acepté ser musa de una página brasilera, pirocadanela.com, que contiene fotos y videos pornográficos. Me muero por protagonizar videos pornográficos  donde tenga que realizar sexo en grupo.



Considero que la masturbación femenina es algo natural, placentero, que permite conocer mejor nuestro cuerpo y que nos ayuda a determinar nuestro punto óptimo de excitación. Por ello la practico frecuentemente, a solas o en la presencia de quien o quienes me acompañen. Me encanta introducirme o dejar que me introduzcan cualquier tipo o cantidad de juguetes sexuales a través de mi vagina y/o de mi ano.






También me encanta practicar la felación, disfruto de sobremanera la práctica del sexo oral . Para mi este es uno de los placeres más grandes que puede vivir una mujer. Les aseguro que no hay un placer mayor que chupar y lamer un pene con la boca, con la lengua y con los labios, e igualmente es muy placentero lamer y besar unos testículos o toda esa zona que va desde los testículos hasta el orificio posterior , incluyendo por supuesto el propio ano





















También practico y me fascina que  practiquen conmigo la llamada cunnilingus que se refiere a la práctica de sexo oral donde se chupa, frota, lame o mordisquea con grados variables de intensidad con la boca, con la lengua y con los labios o los dientes, los labios de la vulva, la entrada de la vagina y el clítoris. También se pueden extender estas caricias hacia el ano, el cual al igual que el coño puede ensalivarse o escupirse para lograr una mejor lubricación.
 
Me enloquece que me practiquen el sexo oral o que yo se lo haga a otros y no me importa si estoy con una persona o con varias a la vez, ya sean hombres y/o mujeres.

Deseo también que sepan que soy una mujer que le gusta distinguirse de las demás, ser una persona auténtica, marcar una pauta e imponer un estilo, sin guiarme nunca por los estereotipos. Como les dije anteriormente siempre uso un vestuario sumamente atrevido que de alguna forma siempre permite entrever mis formas, debido a las transparencias, escotes, aberturas,  o bien a lo estrecho y corto de algunas prendas. Trato de nunca usar ropa interior a fin de facilitar que mis partes íntimas puedan quedar expuestas abiertamente en público y para facilitar el acceso de mi compañero o compañeros a las mismas, cuando y donde quieran.
 
Me agrada la idea de que me coman con los ojos y no me importa que me acaricien o me hagan el amor en público, al contrario lo disfruto. No tengo ningún temor en dar el primer paso y de ser necesario el segundo y el tercero.


Recientemente me he realizado tres tatuajes en diferentes partes de mi cuerpo, los cuales seguro les encantaría ver, sobretodo uno que tengo en mi bajo vientre que ya muchos de mis seguidores en twitter lo conocen en fotos.
 
No creo en el matrimonio pero debo confesarles que tengo firmado un contrato vigente de esclavitud, el cual respeto por completo. Este contrato accedí a firmarlo 1 año atrás con un amigo muy especial que es aquella persona que les dije que hace 7 años me hizo descubrir mi capacidad de entrega sexual, él está aún casado, pero eso me tiene sin cuidado. Yo soy de él cuando él me lo pida y como lo desee, sin obligaciones de su parte. El además es de mente muy abierta, por lo cual me permite trabajar como dama de compañía y me protege para evitar que me sucedan situaciones como las que he vivido anteriormente en otras oportunidades.

Esta soy yo. Por favor discúlpenme los errores gramaticales, es la primera vez que escribo algo como esto. Asi mismo les agradezco déjenme saber por sus comentarios su opinión sobre todo lo que aqui les dije. Igualmente haganme llegar todas las preguntas que se les ocurra, yo trataré de contestarlas en este mismo Blog. Por favor no dejen de seguirme en @gloriaP1948. Muchisimas gracias y besos a todos.